Cuestión de correo

Bagatelas Cuestión de correo de Vital Aza CUESTIÓN DE CORREO Un joven amigo mío, que es un poeta llorón, sufrió de Inés el desvío yo no sé por qué razón. Y al ver su negra fortuna, llorando de amor los daños, fuese a contar a la luna sus acerbos desengaños. –«¡Escucha! ¡Oh, luna adorada!, el pobre chico decía:– ¡dile por Dios, a mi amada, lo que siente el alma mía! ¡Dile cuánto es mi sufrir! ¡Dile cuánto es mi dolor! Y que me voy a morir si no responde a mi amor.» Creyó el pobre ¡qué tontuna! que a Inés se lo contaría, y hasta la fecha, la luna no dijo esta boca es mía. Viendo, con honda aflicción, que la dama de sus sueños no daba contestación a sus amantes empeños,   el triste vate ¡oh, locura! fuese a contar sus amores al céfiro, que murmura entre las pintadas flores. –«Vuela ¡oh, céfiro!, exclamó, a besar sus blondos rizos, y dile a mi Inés, que yo me muero por sus hechizos. ¡Dile que el...

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