Introducción La geofísica se ocupa del estudio de los fenómenos físicos que se verifican sobre toda la Tierra o sobre una parte de ella suficientemente grande para que este hecho sea capaz de imprimir al fenómeno físico un carácter especial. Si bien, por su objetivo, la geofísica se encuadra en el ámbito de las llamadas Ciencias Naturales, por los medios que emplea se halla más emparentada con la física y las matemáticas, y su desarrollo está supeditado a los avances técnicos, dado que precisa, para realizar sus estudios, de numerosas y avanzadas técnicas entre las cuales se halla la informática y el uso de satélites artificiales. La complejidad de esta ciencia, que, además, tiene a toda la Tierra como objeto de su estudio, llevó a crear una sociedad científica a nivel mundial, la Unión Geodésica y Geofísica Internacional, que coordina los trabajos de investigación de casi todos los países del mundo y que, periódicamente, dedica un año (el Año Geofísico Internacional) a la recopilaciónm e intercambio de datos y estudios. La geofísica es una ciencia eminentemente experimental, lo cual la distingue, por ejemplo, de la geología, y sus resultados se expresan, habitualmente, mediante complejas formulaciones matemáticas. Se relaciona íntimamente con la geodesia, puesto que los campos de fuerzas que estudia dependen en gran manera de la forma y la constitución de las porciones de materia que los crean. En un sentido amplio, la geofísica estudia no sólo el globo terrestre, sino la región del espacio que ligada al mismo le acompaña en su movimiento de traslación y de rotación, ya que en esta zona, denominada magnetosfera, se localizan fenómenos importantes del magnetismo terrestre.