Bolivia, Perú. Danza nocturna aymara realizada por jóvenes solteros. Por sus características, esta danza no sólo forma parte importante del proceso formal de enamoramiento entre campesinos sino que también se halla ligada al fortalecimiento de la fecundidad humana, influyendo positivamente en la fertilidad de la tierra. Se realiza periódicamente entre Todos los Santos y principios de la Cuaresma, precisamente en la época del crecimiento de los cultivos o período agrícola más importante. Los instrumentos utilizados son el pinkillu si amenaza helada y la tarka si es lluvia. Se trata de una danza bastante extendida, pues ha sido documentada en varios lugares de los Andes bolivianos y peruanos. En Chuquisaca (provincia de Yamparez), se la realiza en la cima de la colina durante la fiesta de los Difuntos (2 de noviembre). En la provincia de Omasuyus (departamento de La Paz), se baila durante la fiesta de San Andrés (30 de noviembre), aunque es repetida en otras fechas del...