Reliquia de tiempos pasados Hace millones de años extensas regiones de la Europa meridional presentaban el mismo aspecto que el bosque de laurel situado en las laderas del monte Garajonay, que con sus 1.487 metros es el más alto de La Gomera. Mientras que un cambio climático provocó la desaparición repentina de la mayoría de zonas de vegetación subtropical de la era terciaria, en esta isla canaria esta vegetación logró sobrevivir gracias al suave clima oceánico. Otra razón que explica la pervivencia del bosque de laurel, en el que comparten el espacio ejemplares de un solo tronco con otros que se ramifican cerca del suelo, es que el terreno pedregoso y las inclinadas laderas no son aptos para usos agrícolas.