La Divina ComediaEl Paraíso: Canto XXde Dante Alighieri Cuando aquel que el mundo entero alumbrade nuestro hemisferio desciende,y el día en todas partes se consuma,el cielo que sólo de él primero se ...
La mesa, el asno y el bastón maravillososde los Hermanos Grimm Érase una vez un sastre que tenía tres hijos y una sola cabra. Como la cabra alimentaba con su leche a toda la familia, necesitaba buen ...
Las mil y una noches Pero cuando llegó la 20ª nochede Anónimo PERO CUANDO LLEGO LA 20ª NOCHEElla dijo:He llegado a saber, ¡oh rey afortunado , que entonces el visir se levantó, acogiendo con júbilo ...
Las mil y una noches - Tomo V y cuando llego la 815ª noche de Anónimo Y CUANDO LLEGO LA 815ª NOCHEElla dijo:...Y era un hombre de rostro claro, de facciones finas y delicadas, de aspecto elegante ...
Lo prohibido& 160;: XVRefiero cómo se me murió mi ahijadoy las cosas que pasaron despuésde Benito Pérez Galdós IDurante una semana estuve distraído por pesares que no vacilo en llamar domésticos. El ...
Los Ayacuchos Capítulo VIIde Benito Pérez Galdós De D. Serafín de Socobio a D. Fernando Calpena 16 de Octubre.Señor mío: Escribo a usted de tal modo traspasado por el dolor, que no acierto a ...
Jornada Tercera& 160;65Pág. 65 de 92Los baños de Argel Jornada IIIMiguel de CervantesD. LOPELa voluntad se reciba.Entra Cauralí.CAURALISentaos, no os alborotéis,que vengo a ver vuestra fiesta.D. ...
Segunda Parte (Libro V) Capítulo I: Los esponsalesde Fiódor Dostoyevski Esta vez, Aliocha fue recibido por la señora Khokhlakov, que estaba atareadísima. La crisis de Catalina Ivanovna había terminado ...
Bañándome en el río Túmbez un cholo me enseñó a lavar la ropaMás viva que un lagarto su camisa saltaba entre inasibles labios susurrantesy las veloces mujeres de lo líquidofluyendo por las piernascon ...
Rojo y negrode Stendhal Un corazón grande y una fortuna pequeñaBut passion most dissembles, yet betrays,Even by its darkness; as the blackest skyForetels the heaviest tempest.Don Juan, I, 75El señor ...
Prosas profanas y otros poemas: Sonatinade Rubén Darío La princesa está triste... ¿qué tendrá la princesa? Los suspiros se escapan de su boca de fresa, que ha perdido la risa, que ha perdido el color ...
TherosCapítulo IIIde Benito Pérez Galdós Y eso que la señora, sino era el mismo fuego, lo parecía. Dígolo, porque echaba de su cuerpo un calor tan extraordinario, que desde su misteriosa entrada en ...
nonePág. 2 de 5Venganza MorunaVicente Blasco IbáñezEstaba loco. Aquel par de lobas le habían dado alguna mala bebida, tal vez polvos seguidores, que, según afirmaban las vecinas más experimentadas, ...
nonePág. 29 de 158Cañas y BarroVicente Blasco IbáñezSangonera, sucio, hambriento, metiendo su mano a cada instante bajo el gorro lleno de mugre para rascarse con furia, gozaba de gran prestigio ent ...
Capítulo II& 160;03Pág. 03 de 31El comendador MendozaJuan ValeraDon Fadrique López de Mendoza, llamado comúnmente el Comendador, fue hermano de don José, el mayorazgo, abuelo de nuestro D. Faustino ...
El criterio Capítulo XI: Historiade Jaime Balmes I - Medio para ahorrar tiempo, ayudar la memoria y evitar errores en los estudios históricosEl estudio de la Historia es no sólo util, sino también ...
El criterio Capítulo XII: Consideraciones generales sobre el modo de conocer la naturaleza, propiedades y relaciones de los seresde Jaime Balmes I - Una clasificación de las cienciasConocidas las ...
El criterio Capítulo XVI: No todo lo hace el discursode Jaime Balmes I - La inspiraciónEs un error el figurarse que los grandes pensamientos son hijos del discurso; éste, bien empleado, sirve alg ...
nonePág. 2 de 5El purgatorio de San Patricio Jornada 2 Cuadro 1Pedro Calderón de la BarcaFilipo. ¿Cómo excederme? Atrevido, infame…Ludovico. En cuanto has hablado, Filipo, te has engañado.Filipo. No ...
IntroducciónPabellón suizo en la ciudad universitaria de Pars (1932).DESDE la Edad Media, Suiza ha sido el refugio de los perseguidos políticos o religiosos de Europa. Los albigenses, herejes ...
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